La producción mundial de Scania concluye la transición hacia fuentes de energía renovables
5 DE AGOSTO DE 2020
Scania ha anunciado que sus diez mayores plantas de producción mundiales se alimentan ya de energía eléctrica no fósil, una meta establecida para 2020. La última en abandonar la energía fósil ha sido la planta de producción de Scania en Tucumán, Argentina, cuyo abastecimiento de electricidad será asegurado por una central eólica.
“Hemos trabajado mucho este año para alcanzar la meta de eliminar totalmente los combustibles fósiles de nuestras operaciones industriales", declara Leif Borgstedt, Asesor Principal de Energía de Scania. "Adquirimos energía de un gran número de proveedores con Garantías de Origen y otras certificaciones equivalentes, que aseguran el suministro de energía proveniente de fuentes renovables, como la energía hidroeléctrica, eólica y solar".
De las diez plantas de producción de Scania, tres se sitúan en Suecia y dos en Holanda, mientras que Argentina, Brasil, Finlandia, Francia y Polonia cuentan con una planta cada uno. En conjunto, consumen cerca de 450,000 MWh. La adopción de energía eléctrica no fósil representa una reducción anual de 33.000 toneladas de CO2e. En 2019, Scania produjo 91.700 camiones, 7.800 autobuses y 10.200 motores industriales y marítimos.
"Scania desarrolla un ambicioso plan de reducción de su huella de carbono y ha adoptado Metas con Base Científica como guía para los próximos años", afirma Andreas Follér, Director de Sostenibilidad de Scania. "Esas metas no se limitan a nuestras propias operaciones, sino incluyen la reducción de las emisiones indirectas, relacionadas con el uso de nuestros productos."